No todas las plantas son iguales, ni requieren las mismas condiciones para vivir. Por eso hoy vamos a hablar de las plantas ácidas o acidófilas. Unas plantas que tienen unos requerimientos un poco especiales y de las que mucha gente no conoce los cuidados ni origen.
Las plantas ácidas suelen proceder de la zona ecuatorial del continente asiático. Una zona que difiere mucho en cuanto a las temperaturas y condiciones del suelo a la nuestra. La mejor opción para su correcto crecimiento es intentar imitar al máximo esas condiciones de las que son originarias.
Comenzaremos por las condiciones climáticas, ya que no son plantas a las que les guste el sol directo, y en las que mantener la humedad es muy importante. Además, hemos de protegerlas de las fuertes heladas y temperaturas demasiado altas. Seguimos con el suelo, ya que este tipo de plantas acidófilas demandan un pH de entre 4,5 y 6,5 para poder nutrirse de él correctamente. Muestran un desarrollo mayor en suelos entre el 6 y 7 de acidez.
Estas condiciones del suelo podemos lograrlas utilizando sustratos y fertilizantes específicos para este tipo de plantas, que nos ayudaran a corregir el pH del mismo. Entre estas plantas tan especiales nos encontramos con la Azalea, el Rododendro, la Hortensia y la Camelia, de las que hablaremos ahora.
Azalea
La azalea, originaria de Japón, se ha adaptado bien a nuestro clima, y nos sigue asombrando con su floración. Podemos disfrutar de sus flores desde febrero, si la tenemos como planta de interior, o un poco más tarde si la situamos en exteriores.
Rododendro
El rododendro mantiene el verde de las hojas que conforman su arbusto durante todo el año. Además, su floración se produce los primeros meses del año, aportando colorido y alegría.
Hortensia
Las hortensias, son unas de las plantas más deseadas y bonitas que encontramos. Destaca por sus floraciones abundantes y la variedad de colores que encontramos.
Camelia
Las camelias fueron en tiempos consideradas como las más hermosas flores del mundo. Y para nosotros siguen siendo hermosas. Las encontramos en flor durante el invierno, aportando su precioso colorido y destacando entre el resto.
Conociendo un poco las necesidades básicas de estas plantas, ya podemos mantenerlas en nuestro hogar, ¿Cuál os gusta más?