A todos nos gusta que durante el verano nuestro césped cubra uniformemente el suelo. Para lograrlo, es el momento de comenzar a prepararlo.
Ya sabemos que la hierba empieza a crecer más activamente durante la primavera, por eso es un buen momento para abonar el césped y comenzar a desherbar, ya sea a mano o con herbicidas selectivos.
Pero hoy nos centraremos en recuperar la uniformidad del césped, eliminando calvas y zonas amarillentas. Las zonas amarillentas, pueden deberse a varios factores, ya sea la falta de nutrientes, que solucionaríamos con un abonado, la falta o exceso de humedad en el terreno, que controlaremos con el riego, un exceso de corte del mismo, que evitaremos controlando la altura del corte, o alguna enfermedad que deberíamos tratar. Todo esto puede derivar en calvas en nuestro césped.
En cualquier caso, ya sea por causas propias del césped o por retirada de zonas afectadas, vamos a ver como cubrir y repoblar esas calvas o zonas sin césped que nos han quedado.
El primer paso es eliminar los restos del terreno, césped maltrecho, malas hierbas o cualquier elemento que se encuentre en la zona a recuperar. Tras esto, con un rastrillo airearemos el terreno:
Añadiremos el sustrato para césped y lo mezclaremos con el terreno:
Mezclamos bien nuestras semillas y el fertilizante en el envase y lo aplicamos en la zona bien repartida:
Removemos nuestra mezcla de forma que nuestras semillas queden ligeramente enterradas:
Sólo nos quedara esperar a que nuestro césped crezca en la zona, manteniendo el riego controlado, procurando que no le falte humedad a la zona (aunque tengamos que ayudarnos de una manguera) y eliminando posibles malas hierbas :
Otra opción es la utilización de tepes. Los tepes son capas de césped que se extienden sobre el terreno. Podemos recortar de estos tepes pequeñas partes y colocarlas en las zonas afectadas, de esta forma conseguiremos cubrir las calvas de forma rápida.
En el mercado hay disponibles gran cantidad de productos para césped, algunos incluyen abono turba y semilla en la misma mezcla. De esta forma podemos realizar una reparación más rápida.
Una buena práctica para el mantenimiento de nuestro césped es realizarle un aireado y escarificado antes de repoblarlo.
El aireado consiste en pinchar u horadar la tierra consiguiendo muchos agujeritos para logar oxigenar el suelo. Podemos hacer esto con cualquier herramienta punzante, como puede ser una horca, pinchando a intervalos más o menos regulares.
El escarificado del césped es algo importante a realizar cada cierto tiempo, ya que bajo la superficie verde de nuestro césped, se acumulan tierra, restos de raíces y de hojas, que crean una capa impermeable que impide el correcto paso del agua, abonos o aire que necesita nuestro césped. Para realizar escarificado hemos de arañar superficialmente el terreno para romper y eliminar todo lo posible esta capa impermeable. Para realizarlo, podemos usar un rastrillo y arrastrarlo haciendo presión por todo nuestro césped.