Ya ha pasado la época en la que la poinsettia o flor de pascua se convierte en el adorno navideño natural que buscábamos. Muchos piensan que no va a durar mucho tiempo en casa, pero si sabes cómo cuidarla sobrevive sin problemas.
Nuestras queridas poinsettias son unas de las 10 plantas en maceta más vendidas en Europa y Estados Unidos. Y aunque ya hemos hablado de sus curiosidades hay algunos temas que nunca va mal recordar y aprender.
Al contrario de lo que algunos pueden pensar, la flor de pascua es una planta resistente, ya que se trata de un arbusto. Lo que ocurre es que las que adquirimos como decoración para navidad, normalmente proceden de viveros con condiciones distintas a las de los hogares, y al notar cambios bruscos en sus cuidados se estresan y necesitan un periodo de adaptación. Aunque parezca que se marchita, sigue con estos cuidados hasta que recupere su esplendor, incluso si ha perdido todas las hojas, pódala, colócala en un lugar cálido y riega solo cuando la tierra esté seca.
Al igual que todas las plantas no puede faltarle la luz natural, pero no puede darle directamente el sol. Se le debe proporcionar una temperatura constante. Además, en invierno hay que tener cuidado porque la calefacción no le sienta nada bien: si en tu casa hace demasiado calor, pulveriza sus hojas verdes cada día para que tenga la humedad que necesita. Eso sí, es importante mantener las brácteas (Hojas Rojas) y las flores secas.
El riego debe de ser moderado, evitando mojar las hojas rojas y las flores, como ya hemos dicho. Si tenemos un plato bajo nuestra maceta, conviene retirar el agua que pueda quedar en el tras el riego, ya que un exceso de agua puede provocar que lar raíces comiencen a pudrirse. Un buen método de riego es la inmersión, que consiste en introducir la maceta en agua, dejándola escurrir bien tras esto.
Así que ya conoces los cuidados y necesidades de esta planta. ¿Lograras que sobreviva para las próximas navidades?