Oficialmente ya es primavera, aunque el tiempo no acompañe todo lo que debería. Es la época en la que el colorido invade todos los rincones, gracias a la floración de nuestras plantas.
En algunas regiones ya hace calor, pero en otras aún puede helar, ya que aunque la primavera es esa época en la que las temperaturas son ideales para la mayor parte de las plantas, estar pendiente del tiempo es la clave, pero ¿Qué toca hacer en primavera?
Es pues el momento de llenar nuestros jardines, balcones o cualquier espacio que tengamos con coloridas flores: petunias y dimarfotecas, verbenas y surfinias, geranios y gitanillas, begonias, alegrías y muchas más vivaces y anuales de temporada que están ya en flor.
Además, hay otras tareas que son ideales para esta época: plantar coníferas, setos y arbustos, bulbos de flor de primavera y, en el huerto, nuestras hortalizas y hierbas aromáticas.
Aunque no nos guste, la primavera ha llegado también para las malas hierbas, y será el momento de escardar y erradicarlas antes de que semillen. Y junto a este despertar de la naturaleza despiertan también plagas y hongos, que estarán ya muy activos en el jardín y en el huerto. La solución es vigilar nuestras plantas y combatirlos con los productos adecuados para no arruinarlas.
Si aún no lo has hecho, es el momento de escarificar y recebar nuestro césped, para lograr que luzca bonito. Cubre las posibles calvas que hayan surgido, ya sea mediante semilla o con tepes. Como ya hemos dicho elimina las malas hierbas. Si se han extendido demasiado puedes utilizar algún herbicida específico para césped, y como siempre no te sobrepases con el riego, ya que el exceso de agua es perjudicial.
En nuestro huerto, como ya hemos dicho, es el momento de empezar a trabajar. Podemos retirar los semilleros o adquirirlos en nuestro vivero, pepino tomate, apio, cebolla, lechuga, etc. y llevarlos al terreno. Así mismo podemos sembrar directamente en el terreno acelga, espinaca, calabacín, etc. y seguir haciendo semillero de apio o lechuga.